El open banking acaba con el calvario de los reembolsos en iGaming y criptomonedas

Los pagos y reintegros de las plataformas de apuestas online o de inversión en criptoactivos suelen ser una pesadilla para los usuarios. En la mayoría de ocasiones, logran recibir sus ganancias entre uno y cinco días después de emitir una solicitud, en caso de pagos con tarjetas de crédito o transferencias bancarias, con el lastre que eso comporta a su experiencia como cliente. En cambio, los servicios de banca abierta, como Payouts, aceleran este proceso, hasta el punto que el usuario obtiene sus retribuciones instantáneamente, las 24 horas del día, en cualquier momento y desde cualquier lugar.

En los sectores del iGaming y las criptomonedas, los fondos pueden tardar días en liquidarse y los sistemas de pago están aislados y son muy lentos. En los tiempos que corren, nadie quiere esperar para recibir su dinero y los usuarios demandan pagos rápidos que se obtengan en segundos. De hecho, según una encuesta realizada por YouGov y TrueLayer en 2020, un tercio de los inversores considerarían depositar más dinero si pudieran retirarlo al instante.

Los cinco días que llegan a retrasarse los pagos con tarjeta y transferencias bancarias suponen un impedimento para los clientes y no contribuyen a su fidelización. Otra encuesta de YouGov y TrueLayer, de 2021, apunta a que dos de cada tres compradores consideran que el tiempo de espera en recibir un reembolso es un factor importante para volver a comprar en un comercio.

El cumplimiento con la normativa vigente es excesivamente complicado y esto se agrava cuando los comercios se detienen a verificar los datos y la identidad de un nuevo usuario antes de emitir un pago, ralentizando aún más todo el proceso. Los extractos bancarios pueden requerir hasta 10 minutos en cargar y tres días más para que los equipos legales de las entidades los revisen y validen. Otros métodos, como los microdepósitos, pueden demorarse en liquidarse y resultar engorrosos para los usuarios a la hora de confirmarlos. Por no hablar de lo que ocurre cuando el IBAN o los datos de la cuenta se introducen de forma incorrecta y el usuario tiene que reiniciar todo el proceso.

Gestionar una devolución

En las empresas, según un estudio de Loop Returns, un empleado dedica hasta dos horas de su jornada laboral a gestionar una devolución, ya que los reembolsos y reintegros implican gestionar múltiples informes, desplazarse por interminables filas de datos y hacer un seguimiento manual de cada pago. Y eso lleva a innumerables ineficiencias operativas, equivocaciones y quejas de los clientes. “En pocas palabras: los procesos de pago actuales son muy lentos, suponen un esfuerzo adicional y son propensos a cometer errores”, señala Murtaza Bootwala, responsable de producto de TrueLayer.

Con el objetivo de acabar con el calvario que supone para los usuarios este farragoso trámite, la plataforma de servicios de banca abierta, TrueLayer, lanzó el servicio Payouts, que simplifica la mecánica de los pagos y añade un nivel de seguridad adicional cuando una empresa está realizando un desembolso para un cliente.

Además, “los usuarios reciben su dinero como y cuando lo quieran. No hay que pasar por ninguna verificación adicional, ni recordar los datos de la tarjeta, ni aguantar tiempos de espera”, detalla Bootwala. “Cada vez que realizamos un pago a un cliente, es una oportunidad para fidelizarlo. Tanto si los clientes solicitan reembolsos, como si los usuarios retiran sus ganancias o los vendedores acceden a ellas, los pagos deberían ser instantáneos y fáciles”, afirma.

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