El crédito en el sector primario crece un 3,1% en 2020, pero se teme un aumento de la morosidad en los próximos meses

El sector primario, con un 3,1%, ha sido en el que menos ha crecido el crédito en el último año. A junio de 2020, el saldo de la cartera de créditos al sector primario (agricultura, ganadería, caza, silvicultura y pesca) era de 22.150 millones de euros, según un análisis elaborado por la consultora AIS Group, especialista en soluciones a la gestión del riesgo de crédito, en base a los últimos datos de stock de crédito publicados por el Banco de España. Por debajo de él se sitúa solo la construcción, con un crecimiento del 2,2%.

Los créditos a las empresas del sector primario representan sólo el 3,8% del saldo total de la cartera de créditos a actividades productivas en España, frente al 72% del sector servicios (420.500 millones de euros) y el 19,3% de la industria (112.600 millones de euros).

Es la cartera más pequeña, y con los fuertes aumentos en créditos derivados de las consecuencias del COVID-10, la diferencia es todavía más evidente.

Mientras que en el periodo que va entre junio 2019 y junio 2020 la cartera de créditos a empresas del sector primario ha aumentado en algo más de 660 millones de euros (el 3,1%), el total de los créditos a la hostelería ha subido un 27%, unos 7.200 millones de euros. En cuanto a las empresas del sector comercio han visto aumentar su saldo en créditos un 11,7%, que equivalen en su caso a unos 9.170 millones de euros, y la industria ha hecho lo propio en 6.325 millones de euros, que supone un ascenso del 6%.

El sector primario llevaba cerca de un año de desaceleración en su nivel de endeudamiento, si bien en el segundo trimestre de 2020 se produjo el repunte que hace crecer el saldo de la cartera esos 660 millones, lo que hace pensar que los efectos del COVID-19 pueden ser los principales responsables de ese cambio de tendencia.

Aumento de la morosidad futura

A nivel de morosidad, el saldo de créditos dudosos de la cartera de operaciones a empresas del sector primario es de 1.300 millones de euros (a junio 2020), lo que se traduce en una tasa de morosidad del 5,9%. Esta tasa venía en una tendencia a la baja en los últimos registros, desde que alcanzara su máximo del 13,7% en junio de 2014.

Sin embargo, según José Manuel Aguirre, economista y director comercial de AIS Group, el aumento del crédito en este sector puede provocar un aumento notable de la morosidad y la ola de impagos llegará en unos meses. Para evitar que esa ola se convierta en un tsunami que arrase con las carteras de empresas de las entidades financieras, AIS Group recomienda tres estrategias donde tecnología, inteligencia de negocio y analítica tienen un papel clave.

La primera se basa en la simulación de escenarios, donde las técnicas de Inteligencia Artificial, como el machine learning, facilitan la construcción de modelos con un elevado poder predictivo, capaces de visualizar qué sucedería con cada una de las carteras en distintas situaciones macroeconómicas.

Disponer de estas herramientas de simulación ayudan a realizar el cálculo de las provisiones o reservas, ya que permiten anticipar, por ejemplo, cuánto va a afectar al capital de una entidad cada punto de variación del PIB”, indica el directivo, que destaca la importancia de trabajar con escenarios para poder definir estrategias y estar preparados para las contingencias futuras. “Trabajar con escenarios simulados -añade- permite tomar decisiones no únicamente para las operaciones concedidas, sino también para definir políticas de concesión de nuevos créditos”.

Por su parte, los de sistemas de alertas y la inteligencia artificial permiten detectar situaciones de riesgo de impago mucho antes de que se produzcan, dando a la entidad tiempo de reacción para tomar medidas que permitan mitigar o revertir la situación en el mayor número de casos posible.

Finalmente, hay que estar preparado para todas las operaciones que acaben impago, que serán muchas. “Para optimizar la gestión de las cobranzas – afirma Aguirre- es imprescindible equilibrar lo que se puede recuperar y el coste que supone”. Es decir, hay que actuar dejándose guiar por el costo de las acciones a llevar a cabo lo que exige disponer de una buena herramienta de gestión que incorpore una inteligencia de negocio que permita tomar decisiones óptimas basadas en los datos disponibles. “Esta inteligencia responde a cuestiones como quién será el próximo que caerá en mora, qué acción preventiva podemos implementar, a quién le cobramos primero, qué acción será la más indicada en cada caso y su costo, cómo externalizamos…”, señala el director comercial de AIS Group.

Esto se traduce en la posibilidad de implementar scorings de cobranzas, capaces de determinar en qué perfiles se tiene mayor o menor probabilidad de recuperar, y qué acciones son las más adecuadas en cada caso, cuantificando la estrategia en términos de ROI y permitiendo simular las distintas alternativas posibles. Además de modelos de refinanciación que identifican qué clientes presentan una mayor probabilidad de salida de una situación negativa frente a una propuesta de renegociación de la deuda, y qué condiciones son las más adecuadas a cada caso.

La entrada El crédito en el sector primario crece un 3,1% en 2020, pero se teme un aumento de la morosidad en los próximos meses aparece primero en MuyPymes


Muy PYMES
Enlace: El crédito en el sector primario crece un 3,1% en 2020, pero se teme un aumento de la morosidad en los próximos meses

No hay comentarios

Debes estar autenticado para publicar un comentario.

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR